lunes, 25 de octubre de 2010

Dímelo tú.

Y que más dará si un día vienes y me dices qué es lo que he sido para ti, si lo más probable es que para entonces no pueda creerte. Y con qué ojos se supone que tengo que mirarte cuando vuelva a verte. Qué tipo de palabras debo usar para no acordarme del daño que me has hecho. Y cómo tengo que comportarme mientras alguien que no es tú me dice cosas bonitas que podrían haber salido perfectamente de tu boca. ¿Con qué tipo de guarnición se come una todo esto?

No hay comentarios:

Publicar un comentario