domingo, 8 de noviembre de 2009

El tipo de domingos a tu lado

Sé, estoy segura, y no hace falta hacer uso de ninguna reprobación, que mis domingos a tu lado serían mucho más bonitos. El sol desprendería más rayos de luz y las nubes se esconderían un poco más. Sé que sonreiría un 75% más si tú estuvieras cerca y yo, a tu lado. Sé que idearía planes de domingo para dos.

Daría un pequeño paseo hacia tu casa, pulsaría al botón de tu telefonillo y tras escuchar tu voz, te diría que fuéramos al cine, que nos llevarámos a tu hermana pequeña. También me quedaría contigo estudiando algunas tardes, y prepararía la merienda para dos. Después, te merendaría a ti, entre besos y palabras, con miradas de fondo.

Amenizaría tus momentos de tristeza y desesperación con mis caricias, te abrigaría en momentos de frío y te desnudaría el alma para oír tus "te quiero" cortando la respiración al aire. Te enviaría poemas de los mejores poetas una vez al mes y te enseñaría qué espero yo de la vida. Te mostraría episodios de mi vida hasta que tú llegaste a ella y te esperaría por las noches en mis sueños, en cualquier acera, con la intención de estar entre tus brazos durante cinco minutos. Con tal de un abrazo diario como nuestro abrazo del 22 de diciembre de 2008. Con tal de sentirte, por fin.
Sin embargo, a dia de hoy, estas palabras no tienen mucho sentido. Creo que quieres escapar de mi vida, y hacer que yo escape de la tuya de manera simultánea, para no compartir más momentos, para no más encuentros. Sé, también, que daría igual que te hablara de este tipo de domingos ni que te hablara de mi compáñía en tu vida, fuera cual fuera el día de la semana en cuestión; porque no te importo, porque tú no lo sabes, pero es así.

1 comentario:

  1. ¿Sabes? Hay muchas cosas que sí pueden ser, y serán.

    (Y traerán toda la luz a tus domingos).

    Besos con abrazo.

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