jueves, 14 de enero de 2010

Gracias (por todo lo que no has hecho)

Gracias por no venir a recogerme por sorpresa al trabajo ni secuestrarme un jueves noche para cenar. Gracias por no preguntarme qué me pasa en el trabajo y por qué estoy como estoy. Gracias por no tener más de un hueco para mí el fin de semana. Gracias por no adelantar/preferir/quedarte con el plan de dos, de una película y una manta ante cualquier otro. Gracias por no decirme que si mis ojos están más verdes cada día, no es por todo lo que lloré hasta hoy, sino por todas las lágrimas que me robaron las películas más tristes de la historia. Gracias por no quererme tanto. Gracias por no necesitarme como antes y gracias por no soñarme con frecuencia. Gracias por decir mi nombre sin connotaciones cariñosas y gracias por no darle marcha atrás al tiempo en tu memoria. Gracias por tenerme un poco más distante y gracias por sentir frío mi calor, e insensibles mis besos.
Gracias por todo eso, ya que de lo contrario, te querría como no debería volver a querer nunca: con necesidad. Pero me encuentro mejor y los pájaros están dejando mi cabeza vacía.Me estás salvando sin darte cuenta.

Brindaré por ello, con un vaso de agua natural.

Buenas noches.

2 comentarios:

  1. Bien, vamos mejor.Me alegra notar un puntito de distanciamiento.
    Sólo una observacion:nadie te salva( si es que es necesario), te salvas tú.

    ResponderEliminar
  2. No se que tipo de persona tienes a tu lado, ni los problemas que arrastrais. Lo que está claro es que sois de diferentes especies. Tu sensibilidad, está a años luz de su practicidad. Te deseo suerte, porque creo que la necesitas, y mucha valentía, porque sólo así podrás salir de ese circulo que no te deja ser feliz.

    ResponderEliminar