miércoles, 20 de enero de 2010

No entregarlo todo, o presumir de ser fuerte a un toque de corazón

Es verdad eso que dicen de que una vez lo has mostrado todo, no pueden quererte como quieras que te quieren, ni mirarte como quieres que te miren. Pero yo pensaba que contigo iba a ser diferente. Pero no. Entregarlo todo en el primer asalto, es un error de los grandes. Tú estás en un sitio diferente al mío. Tú quieres carne, y eso no es algo malo, pero al final, es lo que me cansé de decirte: yo no puedo reducirme a eso, no sólo a la carne, no sólo a un deseo efímero, estúpido. No. No me da la gana.
Y espero no volver a cometer ese tipo de error, ni contigo ni con nadie. A veces ir de dura es un paso seguro, aunque después no te definan con esa palabra concretamente. Pero es la única manera de echar a andar con un chaleco antibalas en los ventrículos de mi corazón.

4 comentarios:

  1. pues casi entrégalo todo en el primer asalto!

    ResponderEliminar
  2. Lamentablemente es cierto, hay que mantener el suspense, no hay que mostrarlo todo al comenzar. Me gusta tu blog, me hace pensar y recordar momentos vividos. Gracias.

    ResponderEliminar
  3. no pesara mucho esa coraza? dan ganas de ser fuerte, esquiva, pero si darlo todo es parte de ti, porqué abandonarlo? aunque duela, seguro que habrá quien sepa apreciarlo.
    un besote

    ResponderEliminar
  4. No se puede entregar todo a la primera, porque las relaciones -creo yo- se basan en dar cada día un poco más. Y no hay final "si la dicha es buena"...

    Besos

    ResponderEliminar