jueves, 10 de junio de 2010

El desorden más absoluto y la tierna idea de liberarme.

En estos ultimos meses, en mi habitación sólo pueden encontrarse papeles, post-its, lápices, cartulinas y ropa acumulada al pie de mi cama. En estos últimos meses, me he dado cuenta que no sé muy bien lo que quiero, pero sí sé perfectamente lo que quiero.
Lo que quiero es que me digan la verdad, que me apoyen cuando me ven bien jodida, que me echen un cable aunque no lo pida, que me recuerden lo feliz que yo era y me roben una sonrisa bien grande, que me tienten a creer en mí, que me digan que merezco todo eso que aún no tengo, que estén ahí en la medida de lo posible, pero que estén.
Lo que no quiero es ahogarme con este calor, y con estas pocas expectativas, y con este miedo. Sobre todo con este miedo. Desde una perspectiva realista, no tengo ninguna posibilidad de aprobar estas oposiciones, ¿por qué? No voy a enumerar un listado de motivos porque no me va a servir de nada, y porque, probablemente, en este listaod también estaría mi falta de tiempo y dedicación absoluta. Pero si durante un año me he dedicado a trabajar para pagarme unos estudios, supongo que también estaba en disposición de utilizarlo para salir a respirar, acompañada de una coca-cola y una bolsa de pipas saladas.
El mundo me parece un caos del que no quiero formar parte. Por eso, la idea de tener que ordenar todo esto, y ordenar de paso, mi mente y mi corazón, es algo que me va a costar mucho trabajo, y yo quería tomarme agosto como vacaciones. Pero igual hasta para eso hay tiempo.
El desorden más absoluto te aporta la sensación de sentirte demasiado ocupada como para destinar tiempo a quien no se lo merece, y al mismo tiempo, te ofrece un plan: el de liberarte por enésima vez, con las personas que protegen tu corazón por temor a que se rompa otra vez por alguien que no sabe ni mirarte a los ojos. Por eso, quiero mis vacaciones, y quiero ordenarlo todo, con tiempo, y con calma. Como Dios manda.

2 comentarios:

  1. ¿sabe que el orden de tu corazón va a la par que el orden de tu habitación... y vicebersa? Pues empieza por alguno de ellos...! :)

    ResponderEliminar
  2. tomate tu tiempo, para el orden, para el desorden, para sentirte ocupada, para disfrutar de los días.
    tomate tu tiempo porque es tuyo, porque tienes que ser tu la que crea en ti misma, porque eres capaz de lo que te propongas.
    tomate tu tiempo para desafiar al mundo, para encontrarte, para perderte.

    no tengas prisa que todo llegará.

    un beso enorme

    ResponderEliminar