lunes, 5 de octubre de 2009

Las conversaciones que no nos permite el mundo

Un bonito episodio sería que aparecieras de cualquier forma y cualquier hora (se admiten las madrugadas). Y sería bonito, tambien, que quisieras decirme porque de verdad lo piensas que te gusto un poco, que te gusta mi manera de enfadarme con el mundo, mi melena oscura y rizada, mis ojos reclamando y gastando vida. Y yo, te contestaría: "Y tú me gustas porque sabes cómo enriquecerme, porque tienes un poco más de vida que yo, porque de lejos se percibe que sabes aprovecharla y vivirla al máximo, y porque serías un buen maestro en esa materia para mí. Por eso y por muchas más cosas adicionales que sin saber te otorgas y forman parte de ti, me gustas".
Pero volviendo a la realidad y a las conversaciones reales, sólo puedes preguntarme por el tiempo de mi ciudad y yo te pregunto si estás agusto con tu trabajo.
Volviendo a la realidad me doy cuenta que el mundo a veces no da tiempo conjunto a personas como tú y como yo.
Ni tiempo, ni conversaciones que puedan curar el alma, y la vida.

1 comentario:

  1. A mi me gustaría que volviese a aparecer de madrugada, como antaño...

    Besos guapa

    ResponderEliminar