lunes, 27 de diciembre de 2010
Hasta pronto.
domingo, 26 de diciembre de 2010
La llamada que no haré.
domingo, 19 de diciembre de 2010
Eternamente agradecida.
domingo, 28 de noviembre de 2010
La velocidad de las estaciones o que tú ya no estás (para mí)
Estamos a punto de estrenar diciembre, y parece que fue ayer cuando nos moríamos de calor, cuando te pedía que encendieras el aire acondicionado de tu salón, para equilibrar la temperatura ambiente y nuestra temperatura corporal. Está la navidad acechándonos detrás de esa calle y yo todavía no he olvidado esos días preciosos de verano, con las sonrisas y las lágrimas, con todo, pero fueron preciosos. Y tú ya no puedes recordar nada, es como si alguien hubiera entrado en tu memoria y se hubiera llevado todo en una maleta vieja de doble cerrojo. Y yo no sé cómo cambiarlo, ni siquiera sé si tendría las fuerzas suficientes para hacerlo. Para eso, deberías haber aparecido tú, deberías haber sido realmente sincero, deberías haberme pedido perdón en tres idiomas distintos y haberme dicho que pese a que nada empezó, lo repitirías mil veces, y te quedarías con mi primera y última sonrisa para el resto de tus días.
Estamos a punto de estrenar diciembre, y tu ausencia me daña en todos los rincones de mi cuerpo, no por el hecho de no poder verte, o no poder rozar tu brazo, o no poder colarme en el color de tus ojos con tan solo alzar un poco más los míos... no. Lo que de verdad me duele es que hayas hecho todo lo que no tenías que hacer, que hayas dejado correr todas mis palabras por todas las rendijas habidas y por haber, y lo peor de todo, que no eres consciente de la capacidad, del poder que tú has tenido conmigo para conseguir que todo fuera bonito, o feo. Pero se está haciendo tarde, y yo ya he perdido la cuenta de las veces que he intentado acercarme a ti con palabras que te incitaran a decir algo, cualquier cosa, pero contigo siento que soy lo que nunca he sido, que por ti hago cosas que por nadie haría, que no quiero volver a vivir lo mismo otra vez y contigo, que me niego a dejarte en las palmas de tus manos parte de mi dignidad. No puedo ser alguien imprescindible para ti, pero tampoco puedo ser un juguete, y si un día lees esto, entiende que se me hayan agotado las pilas, y las lágrimas.
domingo, 21 de noviembre de 2010
¿Por qué?

sábado, 20 de noviembre de 2010
Pensar un poco en mí.
lunes, 15 de noviembre de 2010
Demasiado (de todo)
viernes, 5 de noviembre de 2010
Transición.
Transición: acción y efecto de pasar de un modo de ser o estar, a otro muy distinto del anterior. Representa un cambio de un estado a otro.
Y te preguntarás por qué escribo esto, por qué esa palabra, y por qué por ti. Es fácil de imaginar, yo lo que quiero y lo que creo estar viviendo es precisamente una etapa de transición, una etapa que me inspire por algo que no seas tú, una etapa que me haga ver más allá del recuerdo de tus ojos, una etapa que me infunde de pensamientos para creer en mí, una etapa que me quite toda la pena que tú me has provocado, una etapa que se lleve la tristeza bien lejos, una etapa que haga emigrar cualquier sentimiento que me hunde en los baúles llenos de nostalgia. Eso es lo que quiero ¿sabes? Vivir esta etapa con la certeza y la seguridad de que saldré algo más sana, algo más a salvo (de ti). Quiero salir con la cabeza alta, con los ojos llorando vida, con una sonrisa bien grande. Quiero completar todas las etapas que me toque vivir, pero tú podías haber evitado ésta, y es algo que recordaré siempre.
miércoles, 3 de noviembre de 2010
De dramas y finales
Un drama romántico del que he salido malherida, e intento con las pocas fuerzas que me quedan, de encontrar el modo de volver a ser quien era, de intentar recordarlo, de adivinar como se puede olvidar a alguien como tú.
Desde el minuto cero me devolviste las ganas de volver a confiar en corazones ajenos, en palabras pronunciadas en voz alta, en latidos constantes llenos de sentimientos, en mis sensaciones, en el futuro incierto.
Desde el minuto cero me hiciste creer que esta película tenía un valor indescriptible para ti y ahora, despues de todo, he descubierto que solo ha sido un trailer que incluso ha desaparecido de tu memoria fotográfica.
El aviso
lunes, 25 de octubre de 2010
Dímelo tú.
viernes, 22 de octubre de 2010
Tu sonrisa
No te he olvidado.
domingo, 17 de octubre de 2010
miércoles, 13 de octubre de 2010
martes, 12 de octubre de 2010
¿Tomamos un café?
Esta entrada es especial para mi, sí, diferente y especial. En esta entrada os informo y os invito al mismo tiempo a conocerme un poquito más, aunque es muy probable que el lugar al que os invito sea única y sencillamente la prolongacion de este blog, de este pequeño rincon donde vuelco (y seguiré volcando) mis pensamientos, mis emociones, mis sentimientos mas reales y mis deseos mas primarios. Desde esta entrada os dejo otra puerta abierta, la de un café donde, si quereis, podeis sentaros, y mirar a través de una ventana distinta, leer pequeñas frases, (pequeñas verdades al mismo tiempo). Supongo que he decidido abrir este "pequeño café" para tratar de seguir construyendo frases que me expliquen por qué siento lo que siento. Sin embargo, tambien soy consciente que una parte de este nuevo rincón va a seguir ligado a uno de los vértices importantes que forman este blog, pero sereis vosotros mismos quienes lo descubrais. Me gustaria no dedicar las lecturas del café a una única persona, a esa persona de la que suelo escribir cuando estoy alegre y también cuando estoy triste, pero también sé que si eso me ayuda a verlo todo desde variadas perspectivas, aprenderé a andar soltándome de peso y cargas innecesarias, me enseñaré a mi misma muchas cosas y seré una autodidacta de las mejores maneras de vivir, pese a todo, que no contra todo. Tampoco sé si será un acierto o un error o si alguna vez la persona en cuestión se encontrará de frente con tanta sinceridad, pero eso no me preocupa. Por tanto, este café queda abierto a todos y todas a quienes os apetezca pasar un pequeño rato en compañía. (No admite comentarios ya que no se trata de blogger, sino de un microblog que no lo permite). Aun asi, si quereis, siempre podreis comentarme aquí.
Al primer café, invito yo.
domingo, 10 de octubre de 2010
sábado, 9 de octubre de 2010
Otoños que no volverán.
viernes, 8 de octubre de 2010
Creencias que me llevan hasta tí.

miércoles, 6 de octubre de 2010
Por una vez en tu vida.
lunes, 4 de octubre de 2010
Por muchas razones.
domingo, 3 de octubre de 2010
Nada divertido.
sábado, 2 de octubre de 2010
¿Qué harías tú?
Soy cabezota, he estado 13 años de mi vida mordiendome las uñas, no me gusta la sacarina y no le veo el punto gracioso a que llueva torrencialmente mientras voy al trabajo. Me da mucha rabia perder cosas que en su día guardé en dios sabe qué sitios para encontrarlos después, y mucho más resignarme a pensar que nunca más podré volver a utilizarlas. No me gusta ver la cama sin hacer y me molesta que en la balanza de ciertas personas el orgullo pese más que el cariño. Mi color favorito siempre ha sido el azul, y nunca me ha gustado el número 5. Tampoco pienso demasiado en mis manías porque lo cierto, es que no tengo una gran lista. Aunque si pudiera, si tuviera la posibilidad de cambiar algo para siempre....sería no poder sentir el frío que siento por las mañanas, cuando el despertador me aleja del sueño en el que por fin volvemos a hablarnos, a encontrarnos. Entonces abro los ojos y recuerdo las instantáneas del sueño que me ha regalado la madrugada. Si pudiera, haría cualquier cosa por retrasar los minutos de esa alarma tan poco querida, por poder sentir calor por las mañanas tras despegarme de las sábanas. Tú...si pudieras hacer algo que quisieras mucho ¿qué sería?
viernes, 1 de octubre de 2010
Palomitas, melodías y palabras.
Un solo motivo.

jueves, 30 de septiembre de 2010
lunes, 27 de septiembre de 2010
La tarde en que no le visitaron las musas.
Todos hemos hablado alguna vez de “querer y no poder”, pero casi siempre pasamos por alto lo de “Poder y no querer”. Eso es lo que a mí me ha pasado con él. Un encuentro esperado en el que le regalo más de diez sonrisas con la esperanza de que me contestes facialmente con alguna de las suyas. Pero no lo consigo. Y si ni tan solo me regala una sonrisa... ¿como iba a regalarme un beso? Por eso os menciono que las situaciones del poder y no querer acaban arañando el corazón, las pupilas y otro cumulo de partes de nuestro cuerpo en los que sentimos demasiado dolor. Yo, sobre todo, sentí desilusión, por un gran listado de cosas que percibí, pero creo que enumerarla me haría mucho más daño. Sólo sé que a veces esperas que alguien te roce la espalda con la palma de sus manos, o que nazca de él enviarte un mensaje telefónico que suene sincero. Esta vez él no ha querido estar cerca, no le han visitado las musas y a mí me ha creado un pequeño vacío.
Una cita distinta.
De sinceridad y sensatez.
Y a veces pienso que ojalá hubieras canalizado todas tus sensaciones (si es que las tuviste) tratando de hacerme sentir bien. Sólo eso.
Hubiera sido la re-ostia. Te lo digo yo.
domingo, 26 de septiembre de 2010
Llámame egoísta, o nostálgica, o lo que más te apetezca.

miércoles, 22 de septiembre de 2010
Tocada y hundida.
Regalame tu foto a tamaño carné que te pedí con una sonrisa. Dibuja ese instante en el que nos miramos al espejo y ahi estabamos, los dos (juntos). Regalame un dia en Toledo para sentir que puedo descubrir (y conquistar) un lugar contigo, por primera vez. Regalame una sorpresa los primeros miercoles de cada mes. Regalame un par de sueños al año. Regalame algo que de verdad quieras que tenga y conserve el resto de mis días. Regalame algo mas que este recuerdo tuyo que yo mimé para no dejarlo escapar nunca. Yo, mientras, escribire tu nombre, haré un lazo con cuidado y te haré llegar toda mi sinceridad envuelta en palabras que, quiza, tampoco sepan empujar esa puerta que mantienes cerrada por temor a ser descubierto, invadido, y tocado. Que no hundido.Recuerda que esto no es el juego de los barcos. Que yo no quiero que digas agua. Que quiero que digas te quiero.Que yo te sigo queriendo (aunque ni puedas ni quieras creerlo).
martes, 21 de septiembre de 2010
Sobrevivir una semana.
Mañana se cumple una semana desde que te di mi ultima señal de vida: unos escasisimos segundos de mi voz. Mañana se cumplen 7 dias desde que no sabemos nada el uno del otro. Para ti habra resultado ser una semana más, para mi ha resultado ser una semana dura, dificil, algo más fría de lo normal y más vacía, y a toda esta suma de ingredientes, añádele tu ausencia, tu nombre en mi pantalla, nuestros no-diálogos y mi manera de aferrarme a todo aquello de lo que hablamos hace sólo un mes y medio.¿Tú lo has pensado? No hace ni un mes y medio desde que me marché, y siento que de nuevo somos extraños, que hemos perdido, que hemos dejado de conocernos solo porque tuve que alejarme. No es justo, no es nada justo que tu decidas alejarte mas para ahorrarte un sufrimiento que de sobra sabes que no te ha inundado. Porque tu no has
sufrido, te acomodaste a mi vida antes de que yo me marchara. Sabias de donde venia, y a donde iba. Y lo dijiste en voz alta, dandome una menor cantidad de besos por lo que podría pasar. Y yo solo hacia que dartelos por mi cuenta, imponiendo mi amor acercandome a tus labios solo para sentir que no me estabas mintiendo, que te estabas reprimiendo, que habia algo bien escondidito en la esquina de la parte derecha de tu corazon, queriendo salir y no salir al mismo tiempo.Mañana se cumple una semana desde que te llamé, y estabas conduciendo, diciendo adios a 12 horas de trabajo ya echadas a la espalda, pensando en descansar, o en olvidarme un poco más para ser todavia mas fuerte. Pero no puedo reprocharte nada, ya he conocido a muchas personas que anteponen su felicidad a la del resto, a la del resto de personas que les quieren, y es otra manera de vivir, mucho mas inteligente, aunque para mi, algo menos practica, no se llevarlo, no si pongo el corazon en todo lo que hago. Supongo que es otra de las muchas cosas que me quedan por aprender, aunque tambien hay ciertas cosas que no se aprenden nunca, y me temo que esta es una de ellas. Soy demasiado cabezota como para invitar a la gente a entrar en mi vida sin permitirme quererles hasta que me escueza el alma.Pero, si vuelvo a la raiz de lo que pretendia ser esta entrada, simplemente puedo decirte que para mi esta semana no ha sido de las mejores de mis ultimos meses, que esta resultando demasiado frenetica y llena de citas con personas de bata blanca y que el cielo esta mucho mas gris desde la ultima vez que te besé. Que esta manera de sobrevivir 7 dias sin tus palabras, es horrible, y no me gusta, pero no es algo inusual. Llevas demasiados dias sin aparecer, y digo demasiados porque creia que habiamos creado algo juntos. Algo para recordar.
domingo, 19 de septiembre de 2010
Cuestión de magia.

Hazme reír.
Chócate conmigo en los coches.
Regálame algodón dulce y bésame.
Sepámonos a caramelo.
Tápame los ojos (y bésame de nuevo).
Hazme reír. Vuelve a hacerme reír como tu sabes.
Como el día en que vimos a aquel perro
correr hasta el infinito y más allá...
viernes, 17 de septiembre de 2010
Déjame ser ambiciosa por una vez en la vida.
lunes, 13 de septiembre de 2010
¿Te acuerdas?
¿Te acuerdas de la noche que preferiste mis besos y caricias sobre tu sofá a la película? Lo sé, es muy probable que no te acuerdes pero creo que voy a echar de menos al chico de esa noche en muchas ocasiones, el resto de mi vida.
Y mientras, me seguiré acordando de esa noche como si hubiera sido uno de los momentos más especiales, más intensos de todos. Parecía no acabar nunca... parecía que iba a prolongarse durante días, durante semanas y durante meses. Parecía que ibamos a estar siempre ahí, alimentándonos de besos y cosquillas al mismo tiempo, persiguiéndonos con miradas llenas de calor y de ganas. Pero te tuve, y me tuviste, te sentí y me sentiste. Respiramos y te abracé, y me quedé quieta, dándote algún beso más despistado encima de las sábanas sobre las cuales nunca imaginé que podría tocar.
¿Te acuerdas de la noche que me preferiste ante todo lo demás?
¿Sabes una cosa...?
miércoles, 8 de septiembre de 2010
¿Lo harás?
lunes, 6 de septiembre de 2010
En resumen.
Seguramente no puedas ponerte en mi situación. Muy seguramente jamás podrás acercarte a esto que siento por ti. No sabes lo que es quemarte por dentro cuando estás en el trabajo y al pedirle los datos a alguien a quien no conoces, me pronuncie tu nombre dos veces seguidas por si no lo he oído bien. Tampoco sabes lo que es salir a las ocho de la tarde mientras tus padres te esperan en una terraza para tomar algo y de vuelta a casa saludan a alguien y te dicen su nombre. Joder, ¿también tenia que ser el tuyo? ¿Es necesario escribir, escuchar y leer tu nombre casi por triplicado en menos de 8 horas? Esto no debería ser así. No.Yo debería tener un radar en el corazón, una cremallera funcional con la que poder ponerme a salvo.Yo debería haber resuelto ya la ecuación exacta, debería haber puesto en práctica desde el primer día la teoría que me salvaría del ahogo, de la pena más profunda. Debería haberte querido un poco menos. Y debería, como mínimo, haberte prohibido besarme más de la cuenta, para no llevarme tu olor, tus ojos en mis retinas, tu risa en mi cabeza, tu manera de mover las manos, tu manera de toser, tu manera de estornudar, tu manera de caminar, tu manera de bromear conmigo, tu manera de fingir que tu coche ya no está donde lo dejaste, tu manera de devorarme la boca a las dos de la madrugada. Pero, como siempre, no aprendo. Porque llegados a este punto, no necesito a alguien que me enseñe como hacerlo, solo necesito a alguien que me frene a la hora de querer para no dejarme encima del asfalto el cariño sobrante que al resto no les hace falta. Como a ti, que quizá todo te pareció demasiado.
Pero ya no me resigno pensando que llegué en el momento equivocado, en un instante de tu vida erróneo, en el capítulo impreciso. No. Lo he dejado todo en tus manos y lo único que puedo pensar es que los dos estuvimos equivocados. Pero no vas a aparecer, no vas a convencerme de lo contrario. Ni siquiera vas a gastar de tu tiempo en escribir un resumen como hacíamos de pequeños sobre todo esto. Ni siquiera te molestarías en poner un título a la redacción cuyos protagonistas fuéramos nosotros. Ni tan solo te esforzarías por escribir un final cualquiera para los dos.
viernes, 3 de septiembre de 2010
Perderse.

miércoles, 1 de septiembre de 2010
Lo que me faltaba.
jueves, 5 de agosto de 2010
Pensaba.
miércoles, 4 de agosto de 2010
Inevitable.
jueves, 22 de julio de 2010
No me cansaría.
sábado, 17 de julio de 2010
No me he marchado y ya te echo de menos.
Sentir (contigo).
lunes, 12 de julio de 2010
Conversación de autocar.
jueves, 8 de julio de 2010
Cosas que tengo que hacer.
jueves, 1 de julio de 2010
Vacaciones.
martes, 29 de junio de 2010
Seamos realistas.
Necesitarse (o no).
Insuficiente.
sábado, 26 de junio de 2010
Tú no has aprendido de los errores y yo no he podido perdonarte.
viernes, 25 de junio de 2010
Decepción.
Érase una vez, dos desconocidos: dos completos desconocidos.
martes, 22 de junio de 2010
Me da rabia.
Sin embargo, a veces creo ser valiente por luchar y exponerme a algo que sé que dolerá. Como una hoja de papel que limita tu futuro. De todas formas, el sol va a seguir saliendo y yo tendré que hacer lo mismo. No habrá nada que me calme tanto como el dormir y el desaparecer un ratito bajo las sábanas que huelen a verano. No habrá nada como caerme del todo para poder (y querer) levantarme de nuevo.
lunes, 21 de junio de 2010
Armarse de valor.
Para mí, armarse de valor es calzarse unos zapatos grandes y seguir caminando como si nada. Y creo que salir (o almenos intentarlo) hacia adelante es colgarse una sonrisa blanca y unos ojos a punto de gotear rocío.
Ser fuerte es mirar hacia el futuro, pensar en el presente, y clasificar el pasado, quedandote con lo bueno sin aferrarte a él mas tiempo del permitido para no caer en la aterradora melancolia, que acaba comiendose todas nuestras fuerzas. Todo esto es complicado, lo sé, pero creo que de haber una salida, la mia consiste en la de elegir bien con quien me quedo, aunque esta sea otra de las cosas mas complicadas que tiene la vida.
domingo, 20 de junio de 2010
¿De verdad no hay tiempo para todo?
Porque, joder, ya está bien.
miércoles, 16 de junio de 2010
Tristeza, nervios y sueño.

domingo, 13 de junio de 2010
Lo último que te diría.
jueves, 10 de junio de 2010
El desorden más absoluto y la tierna idea de liberarme.

domingo, 6 de junio de 2010
De todos modos, felicidades.
Mañana es 7 de junio. Mañana es tu cumpleaños. Hace un año te escribí esto. Supongo que estaba rota de dolor y llena de dudas. Y tú sin saberlo. Aún así, hace un año aún albergaba una pequeña esperanza de que todo se arreglaria entre nosotros. Y de que abrirías los ojos un poco, y que no serías (tan) orgulloso conmigo. Supongo que pensé en que pese a todo sería alguien realmente importante para ti, o simplemente alguien con quien contar, como el resto de las personas que te rodean. Pero me equivoqué. Como tantas otras veces.
Y supongo, también, que es algo que ya he me perdonado, pero siempre dejé que me calaras demasiado hondo, y eso acaba dejando secuelas que no siempre el tiempo está en disposición de borrar. Hoy pensé en aquel cumpleaños al que acudimos los dos y fui tras de ti incansablemente. En aquel entonces yo no era nadie para ti, ¿por qué debería haberlo sido después? ¿por qué he tenido que ilusionarme con una amistad que tú has perdido y ni siquiera te sientes algo abandonado? Creía que eras especial, pero no supe ver durante mucho tiempo que la única que apostaba por la relación que teníamos era yo, y no tú. Creía que todo volvería a su cauce, y que mañana, en tu 22 cumpleaños, podría escribirte un mensaje o llamarte para que escucharamos nuestras voces. Pero tú lo cambiaste todo, y yo tuve que cortarlo todo.
He borrado tu número de mi móvil, aunque sigo recordandolo. He intentado borrar tu nombre de mi cabeza, pero la tele no hace más que recordarmelo. He intentado no acordarme del dia de tu cumpleaños, pero, como tantas otras cosas, es imposible. Culpa mía, quizá.Porque quizá no tenga remedio.Aún así, creo que me merezco todo eso que no has sabido darme.
De todos modos, felicidades. Aunque no puedas oirlo.
domingo, 30 de mayo de 2010
Tarde.
- Creo que no fuimos inteligentes y que no supimos cambiar las cosas.
- ¿Y qué harías ahora?
- ¿Ahora?
- Sí, ahora.
- Nada. Creo que no haría nada, y creo que de no hacerlo, tampoco me arrepentiría el resto de mi vida. Tú ya no me querías y yo perdí mi confianza en ti. Sin eso, nada podría haberse arreglado.
- Supongo que llevas razón.
- Y supongo que esta conversación no tiene ningún sentido.
- Tal vez, pero quería despedirme de ti. No quiero que pasen diez años y entonces pueda torturarme porque ni siquiera lo hice.
- ¿El qué?
- Pues despedirme, decirte adiós.
- Hubiera estado mejor que no te despidieras. Yo ya te había olvidado lo suficiente como para no necesitar esto.
- Pero es que yo sí lo necesitaba. Aún así, tampoco estaré en paz el resto de mi vida sabiendo que esto era de verdad, que esta pérdida era de verdad.
- Llegaste tarde para darte cuenta de todo. Demasiado tarde.
Quizá.
viernes, 28 de mayo de 2010
Bórrame, y estaremos en paz.
miércoles, 26 de mayo de 2010
Contraproducente.
lunes, 24 de mayo de 2010
Superas los límites.
lunes, 17 de mayo de 2010
La peor manera de decirse adiós.
domingo, 16 de mayo de 2010
Lo que me cura.
viernes, 14 de mayo de 2010
Proceso de aprendizaje.
1. Dar en cantidades iguales de lo que recibo (eso me ha ahorrado y sigue ahorrándome muchos dolores de cabeza y mucho mucho tiempo).
2. No cerrar los ojos más de la cuenta (me ha convertido en alguien mucho más consciente de las verdades que duelen, pero que al fin y al cabo, están ahí para afrontarlas, y no para huir de ellas).
3. No lamentarme porque la gente piensa en sí misma y punto (es algo que ya sabía pero que no quería decirme en voz alta para no hacerme más daño).
4. Soñar más y vivir más lento (quizá por eso siempre tenga sueño y me apetezca saborear el momento).
5. No confiar en palabras muertas y proverbios sinsentido (entrenándote, es fácil distinguir quién dice la verdad de quién no).